LOGRAN DICTAMEN PARA ACUERDO CON IRÁN

Tras un extenso debate, que se prolongó por más de 6 horas e incluyó cruces tensos, el kirchnerismo consiguió un despacho de mayoría. Será tratado la semana entrante en el recinto del Senado. Durante su exposición, Timerman remarcó que “en ningún lado dice que nosotros confiamos en Irán”. La comunidad judía volvió a rechazar el memorándum

Pese al fuerte rechazo de la dirigencia judía y todo el arco opositor, el oficialismo en las comisiones de Relaciones Exteriores y Culto; de Justicia y Asuntos Penales; y de Asuntos Constitucionales de la Cámara alta logró finalmente un dictamen de mayoría y ahora el memorándum de entendimiento será tratado sobre tablas el próximo jueves, en busca de darle media sanción del Senado.

Durante el plenario de comisiones, el canciller Héctor Timerman acudió para informar los alcances del acuerdo firmado con Teherán a fin de interrogar a los acusados por la voladura de la AMIA.

Aseguró que las indagatorias se realizarán bajo la ley nacional y admitió que es improbable que los sospechosos vengan a la Argentina, descartando la posibilidad del cumplimiento de una eventual condena. “No fantaseen, no hay cláusulas secretas”, lanzó en medio de un debate “picante”.

El titular del Palacio San Martín remarcó que “en ningún lado (del acuerdo) dice que nosotros confiamos” en Teherán. De esta manera reconoció que es improbable que los sospechosos del atentado arriben a la Argentina y cumplan una eventual condena.

Timerman recordó que, de acuerdo a las leyes vigentes en nuestro país, un imputado en un proceso penal tiene la posibilidad de negarse a declarar y en caso de que el acusado decida guardar silencio, “de modo alguno puede entenderse como una presunción en su contra”. Es más, aclaró que la indagatoria es un mecanismo de defensa que tienen los sospechosos a su alcance en el marco del debido proceso.

En la reunión estuvieron presentes los titulares de la AMIA y la DAIA, Guillermo Borger y Julio Schlosser, respectivamente, quienes reiteraron su rechazo al memorándum firmado con el régimen de Teherán pero no lograron despejar sus dudas, tras la exposición de Timerman.

También participaron las organizaciones que nuclean a los familiares de las víctimas del atentado a la AMIA. Estas se mostraron divividas en cuanto al apoyo al acuerdo.

Los detalles de un enardecido debate

La exposición de Timerman se desarrolló en un clima tenso, que abundó en cruces entre el canciller y los senadores de la oposición, pero también entre legisladores oficialistas y autoridades de la comunidad judía.
Uno de los enfrentamientos más fuertes fue entre el titular de la cartera de Relaciones Exteriores y el radical Gerardo Morales, quien sostuvo que con este acuerdo “el Gobierno claudicó” y agregó: “Modificaron toda la posición, no es Irán quien modificó su posición porque ya desde 2007 Irán pedía una comisión de expertos. Lo que hicimos fue ponernos de rodillas”.

“El canciller nos está mintiendo en la cara, porque según la cláusula cuarta del memorándum, una vez interrogados los imputados no habrá necesidad de volver interrogarlos en el futuro”, agregó.

Cuando le tocó responderle, Timerman no se exaltó pero acusó a Morales de haberlo “insultado” al hablar de claudicación y mientras el senador intentaba retrucarle con el micrófono apagado, lo frenó: “No me interrumpa senador porque yo no lo interrumpí a pesar de sus agravios”.
Otro momento álgido se produjo cuando el radical Ernesto Sanz leyó un discurso de la presidente Cristina Kirchner ante la ONU, en el que aseguraba que no tomaría “ninguna decisión” sobre este tema “sin consultar a los familiares y a las fuerzas políticas con representación parlamentaria”.

“¿La Presidenta va a cumplir con su palabra, señor canciller?”, preguntó Sanz, a lo que Timerman respondió que “la palabra de la Presidenta se está cumpliendo porque nada se va a llevar adelante si el Congreso no lo aprueba”.

Más adelante, Timerman le respondió con una chicana al radical, cuando el senador mencionó la negativa de Irán a que su ministro de Defensa, Ahmad Vahidi, declare delante del juez de la causa AMIA.

“¿Quién lo dijo? Un vocero. ¿Le cree más al vocero que al canciller? ¿Por usted senador habla usted o su vocero? Le voy a empezar a creer a su vocero”, le respondió el canciller.

Otro choque se produjo con el también radical Mario Cimadevilla, quien aseguró que lo que firmaron “es un convenio tramposo para la Argentina” porque “el juez estará obligado a seguir las normas de procedimiento que fije la comisión”.

Ante los ademanes con las manos y el elevado tono de voz de Cimadevilla, Timerman le gritó: “¡Bájeme los deditos!”.

Pero no fue el único encontronazo que tuvo el radical. Tras criticar con dureza el acuerdo alcanzado entre los gobiernos argentinos y el iraní, su vehemencia fue advertida por su par del Frente para la Victoria Marcelo Fuentes, quien al responderle lo calificó de “MacGyver” porque “con un palito logra hacer una fogata”.
“Siempre dije que si alguna vez me pierdo en un bosque quisiera estar con usted, porque con un palito hace una fogata, me hace acordar a MacGyver”, disparó irónico Fuentes al referirse a la serie televisiva norteamericana en la que un detective salía de aprietos utilizando los más inusuales objetos.

Los momentos incómodos, de todas formas, no terminaron ahí. Cuando el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Daniel Filmus, invitó a exponer a la AMIA y la DAIA y aseguró que había además dos agrupaciones de familiares de las víctimas que iban a hablar luego, Laura Ginsberg, de la Agrupación por el Esclarecimiento de la Masacre de AMIA, irrumpió a los gritos.

“Nos han ninguneado sistemáticamente. Son tres las organizaciones de familiares y ustedes lo saben. Todos tenemos derecho a hablar”, exclamó Ginsberg mientras se acercaba al centro del salón, en dirección a Filmus.

Ante este episodio, el presidente del bloque oficialista, Miguel Ángel Pichetto, se mostró molesto y también alzó la voz: “Hay que poner orden presidente. Esto es el Senado de la Nación y acá no se puede hacer cualquier cosa, nadie puede hacer cualquier cosa”.
Pichetto fue a su vez protagonista de otro cruce que, si bien se desarrolló en un tono más calmo, tensó la reunión durante algunos segundos, dado que se refirió a la política del Estado de Israel en Medio Oriente para responder a las críticas del titular de la AMIA, Guillermo Borger, al acuerdo bilateral.

El titular del bloque oficialista les pidió a los representantes de las organizaciones que tuvieran “un análisis internacional de las cosas que están pasando” y subrayó que “algunos sectores religiosos en el Estado de Israel no entienden que el diálogo puede ser un camino para la paz”.

El pedido de la Presidente a Pichetto

Si bien las tensiones sobresalieron durante el plenario de comisiones, también hubo espacio para situaciones insólitas, como el pedido de Cristina Kirchner que el jefe del bloque del FpV retransmitió al canciller, y se escuchó por las señales televisivas.

Cuando el debate en el Congreso llevaba casi cuatro horas, y tras la palabra del senador Marcelo Fuentes, Pichetto se acercó a Timerman y le dijo algo al oído.

Las palabras del senador fueron tomadas por los micrófonos y se lograron escuchar en las trasmisiones televisivas. “A las 17:30, la Presidente me pidió que definamos rápido”, le dijo el kirchnerista al titular del Palacio San Martín.

Al momento de pronunciar esta frase, todavía restaba escuchar la palabra de los titulares de AMIA y DAIA y las exposiciones de los familiares de las víctimas al atentado contra la mutual judía. Todos estos oradores a su vez respondieron preguntas de los legisladores.

El pedido de Cristina Kirchner se cumplió al pie de la letra y la mandataria inició su acto en Chubut poco después de las 17:30.