REVELAN DETALLES ESCALOFRIANTES DEL DOBLE FEMICIDIO DE SAN MARTÍN

Cada dato nuevo que aportan los peritos y los investigadores a la causa es escalofriante. Tanto, como impactó el domingo el fatal desenlace de lo que se creía era una toma de rehenes, en el marco de un drama familiar que se extendió por seis horas, en una vivienda ubicada en la zona oeste del Gran Buenos Aires.

Apenas concluyó el domingo el fatídico “secuestro” con la detención del acusado, Lucas -un sobrino de Silvana Eiriz, la maestra asesinada, y primo de su hija Valeria, también muerta- había contado en declaraciones televisivas que, según lo que tenía entendido, la joven había concurrido hasta la casa de su madre ese día, en horas del mediodía, con su novio para visitarla.

En la puerta del domicilio, ubicado sobre la calle Sarmiento al 5000, en el partido de San Martín, ambos se habían topado con la ex pareja de la mujer, quien quería entrar a la casa pero Silvana se lo impedía. Según el relato de Lucas, fue entonces cuando se produce en la vereda una feroz discusión y Pablo Peralta, el agresor, le pega un tiro en el abdomen al novio de Valeria, que lo dejó en terapia intensiva, y en estado reservado.

Tras el balazo, tomó a su hijastra y logró ingresar por la fuerza a la vivienda, donde finalmente se atrincheró con las dos mujeres. El aparente secuestro duró seis horas, el lapso que tuvo el Grupo Halcón para descubrir que el atacante en realidad fingía que mantenía con vida a su ex pareja y a la hija de ella.

Ahora se sabe que los hechos se sucedieron de manera muy distinta. Por el resultado de la primera autopsia, la maestra fue ahorcada entre el viernes a última hora y el sábado a la madrugada, publica el diario Clarín. Valeria, que era una de sus tres hijas, sí fue asesinada el domingo, cerca de las 13.

La joven, de 20 años, se había acercado hasta la casa de su mamá no para simplemente visitarla sino porque habría recibido un mensaje del agresor, quien se cree pasó un día con el cuerpo de su ex mujer. En ese tiempo, escribió una carta en la que admite que la mató por celos y da a entender que planeaba suicidarse.

“(Silvana) Dejó de existir el viernes. No me separé de ella. Estoy muerto yo también. Yo preso no voy. Me voy con ella. Perdón por todo esto. Se podría haber evitado”, escribió Peralta en la misiva, que apareció con manchas de sangre de Valeria, de acuerdo a lo consignado por el matutino.

En otro tramo del texto, asegura que el crimen “fue decisión de ella, porque nos amábamos a pesar de las peleas”. Luego intenta justificarse afirmando que la maestra tenía una relación amorosa con otro hombre y remarca: “La voy a abrazar tan fuerte que no nos van a poder separar”.

La hipótesis de que Peralta habría convocado a Valeria a la casa surge de lo que reveló a la Justicia un tío de la joven, identificado como Javier. “Valeria le envió un mensaje a su tía Vivi y a una de sus hermanas contándoles que había recibido un mensaje escrito de una manera rara de la mamá, que pedía que la vaya a ver”, relató el hombre.

Y añadió que ellos le contestaron a Valeria que “era peligroso, que no vaya, pero ella ya estaba decidida”. La joven, dijo, pedía que la fueran a buscar si al rato no tenían noticias. Es por eso que los investigadores creen que el detenido se hizo pasar por la maestra y le envió el mensaje de texto “raro”.

Peralta está detenido en la unidad carcelaria de José León Suárez, imputado por “doble homicidio y tentativa de homicidio, tenencia de arma de guerra y abuso de armas agravado por disparar contra personal policial y privación ilegal de la libertad”.

Si se comprueba que él envió el MSM fatal convocando a la hija de su ex pareja, se agregaría el cargo de “homicidio con alevosía”. Hoy, a las 9, deberá dar su versión de los hechos ante el fiscal Fabio Cardigonde. Mientras tanto, los peritos siguen inspeccionando los cuerpos de las dos víctimas porque quieren descartar, o confirmar, si fueron abusadas antes de ser asesinadas.