ENSEÑAN COMPUTACIÓN EN EL CENTRO DE CIEGOS Y DISMINUÍDOS VISUALES
La actividad forma parte de la diversa oferta del Centro “Ana Goitía”, una entidad que recientemente celebró sus 30 años de existencia con la puesta en valor del edificio por parte del Municipio de San Fernando. Se trabaja con los programas de Office: Word, Excel y PowerPoint, y ofimática; Mecanografía para aprender las teclas y poder manejarse; uso de correo y navegador, para fomentar la comunicación entre los alumnos y su familia y amigos; y también en la reinserción laboral.
El Municipio acompaña la tarea del Centro de Día para Adultos Ciegos y Disminuidos Visuales “Ana Goitía de Cafiero”, institución sita en Besares 1240 – Tel. 4746-2876, que ofrece actividades de rehabilitación y talleres complementarios para la comunidad de personas con discapacidad visual, entre ellas Computación.
Su Coordinadora, María Laura Vicenti, dijo: “San Fernando es un Municipio muy interesado en las políticas inclusivas; específicamente, la nuestra es una institución abocada a la discapacidad visual, tanto de personas ciegas como disminuidas. Tenemos distintas áreas: de admisión; de rehabilitación con distintas materias como Braille, Informática, Orientación y Movilidad -que es el uso del bastón en la casa como en la vía pública-; taller de Uso del Celular; Rehabilitación Visual para personas con resto visual, y Actividades de la vida diaria, que enseñan a manejarse en su hogar. Luego de eso, un área complementaria de actividades físicas y artísticas; de oficios, y también de visibilización en la comunidad con diversos programas y proyectos”.
Vicenti destacó también que parte de la tarea del Centro es posicionarse y hacer campaña en lo relativo a la terminología correcta; hay una convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad con fuerza de Ley, siendo muy importante que la sociedad se exprese evitando términos como vidente, no vidente, minusválido, inválido, capacidad especial o necesidad diferente, que son términos que sobrevalúan o disminuyen a la persona. Debe hablarse de “persona con discapacidad” motriz, mental, sensorial, o visual como en este caso.
“En este momento contamos con 57 beneficiarios; también estamos en campaña para captar más vecinos de San Fernando que nos necesiten. Esperamos a toda aquella persona que tenga dudas acerca de su situación,
recibiéndolos con su certificado de discapacidad y DNI con domicilio en el partido de San Fernando”, finalizó Vicenti.
Gervasio Nieto, profesor de Computación, explicó: “Lo que hacemos básicamente es con los programas de Office: Word, Excel y PowerPoint, y todo lo que sea ofimática; también Mecanografía para aprender las teclas y poder manejarse; el uso de correo y navegador, para fomentar la comunicación entre los alumnos y su familia y amigos; y también la reinserción laboral, en el caso que estén interesados. Lo principal es usar la computadora para comunicarse, pero los alumnos más avanzados hacen programación apuntando a diseñar aplicaciones que puedan servir a otras personas que no ven que recién arrancan en Computación. No tenemos limitaciones, porque los programas dicen lo que está en la pantalla, lo elementos, van pasando por cada opción; los más avanzados directamente usan atajos, y eso hace que trabajen más rápido que las personas que recién empiezan Computación”.
Uno de los alumnos, Héctor Lagorio, contó: “Para mí, es aprender un poco más, porque las personas como nosotros en estos tiempos tenemos la facilidad de avanzar y enterarse de las cosas novedosas que existen ahora. La computación es muy novedoso y uno aprende muchas cosas. No es un auxilio, porque como uno perdió la vista, es una forma de aprender, de enterarse de cómo está el mundo. La computadora es muy interesante, depende como uno la utilice. Para mi punto de vista, aprendí mucho gracias a ella”.
Y su compañera Isabel Galván finalizó: “Fue muy buena la posibilidad de reinsertarme en el ámbito laboral y en lo social; me ayudaron muchísimo a rehabilitarme tanto como para salir sola a la calle con mi bastón, como para aprender y poder trabajar. Fue el día y la noche desde que vine aquí; sin este lugar que me capacita, enseña, contiene, ayuda, no hubiera podido hacer una buena rehabilitación. Me hubiera faltado mucho, por más buena voluntad que hubiera tenido, aunque a veces nuestros familiares tratan de que no salgamos para que no nos pase nada; no nos quieren soltar; pero uno necesita de un lugar como éste para estar rehabilitado y pueda ser una persona independiente”.