UNA POSTA DE SALUD ATENDIÓ A VECINOS DE LA VILLA LA CAVA

La Secretaría de Salud Pública de la Municipalidad de San Isidro finalizó el pasado sábado la campaña “Promoción de la salud y prevención de enfermedades” en el barrio La Cava, que había comenzado el miércoles 21 de noviembre.

Al igual que en los días anteriores, cientos de vecinos del barrio, en Beccar, se acercaron a la Plaza 12 de Octubre (Tomkinson y Bergallo), donde se habían instalado seis puestos sanitarios (gazebos). Allí, pudieron realizarse distintos controles: nutricionales, cardiovasculares, odontológicos, y de glucemia y colesterol.

También hubo dos carpas de la Subdirección de Zoonosis y Control de vectores, en los que se vacunó a mascotas y se informó sobre el dengue.

Más de 50 profesionales –médicos, odontólogos, veterinarios y enfermeras– atendieron a grandes y chicos. Durante la jornada, los vecinos pudieron vacunarse, realizarse mediciones antropométricas (peso, talla, índice de masa corporal) y de presión, y también informarse sobre riesgos cardiovasculares.

Susana Abelleira, subsecretaria de Salud Pública de San Isidro, explicó: “Concentramos aquí algunos de los programas que se llevaron adelante durante todo el año 2012. Con esta campaña queremos que la gente tome conciencia sobre cuáles son las principales entidades clínicas sobre las cuales pueden actuar en prevención y generar hábitos de vida saludable tratando de desechar los nocivos como el tabaquismo, el alcohol y el exceso de peso”.

La funcionaria agregó que la acción responde a la política de salud que lleva adelante el municipio: trabajar en la prevención de la enfermedad y en la promoción de una vida saludable y de una mejor calidad de vida.

Abelleira también destacó la doble función de los puestos. Además de ofrecer una prestación de salud, allí también se repartió material informativo sobre las afecciones más comunes durante el verano, como la diarrea aguda, el síndrome urémico hemolítico y el golpe de calor.

El primero de los puestos del recorrido sanitario estuvo concentrado en las inmunizaciones. “Aquí, sobre todo, hemos vacunado a niños que el año que viene comienzan el colegio y a pacientes de riesgo que necesitaban, por ejemplo, la vacuna antineumocócica y casos especiales que han sido evaluados por los pediatras e infectólogos”, especificó Abelleira.

En la posta de salud bucodental, odontólogos del Hospital Central de San Isidro examinaron a cada uno de los vecinos y, en algunos casos, realizaron las derivaciones correspondientes para realizar un tratamiento o curar caries. Además, los profesionales enseñaron a los más chicos, maqueta mediante, al correcto cepillado de dientes. Finalizada la charla, cada niño se llevó de regalo un cepillo de dientes.

“Es importante que conozcan el estado de su salud buco dental para poder derivarlos y que puedan realizar cada uno el tratamiento que necesiten”, señaló el odontólogo Damián Carrillo.

Mientras esperaba el diagnóstico de su hijo, el vecino Pedro López comentó: “Esta propuesta es muy positiva para la salud de los chicos y grandes. Es una jornada bárbara. Yo pasé por todos los puestos y estoy 10 puntos”.

El tercer, cuarto y quinto gazebo estuvieron abocados a la prevención de enfermedades cardiovasculares. En primer lugar, a cada vecino se le asignó una ficha clínica, donde volcaron los resultados de las mediciones antropométricas (peso, talla, índice de masa corporal). El siguiente paso fue el control de la presión arterial e inmediatamente después pasaron al puesto donde se hicieron los controles de colesterol y glucemia en sangre.

“Con solo un pinchacito en un dedo podemos conocer los niveles de glucosa y colesterol en sangre y así conocer los riesgos de enfermedades cardiovasculares. En los tres minutos que demora el proceso se puede detectar y prevenir”, aseguró la enfermera Mariana Caruchet.

La vecina Susana Viteri Alonso aseguró que fue para conocer su estado de salud. También dijo que la iniciativa le parecía buenísima para la gente que no tiene tiempo de ir al médico.

Con su índice de colesterol y glucemia en mano, el vecino Juan José López dijo: “No voy al médico por fiaca y porque trabajo muchas horas. Estuvo muy bueno que hagan esto y que sea gratis”.

En el siguiente gazebo, médicos clínicos, según los resultados obtenidos, aconsejaron a cada vecino, según los indicadores obtenidos. En el caso de que el paciente no tuviera un médico de referencia, se le asignó un clínico de la Red de Atención Primaria o a un especialista del segundo nivel de atención del Sistema Municipal de Salud.

En la carpa clínica, el doctor Alfonso Stagno, director del Hospital Ciudad de Boulogne, explicó que se estaba realizando un asesoramiento médico para prevenir eventos cardiovasculares en el futuro o trastornos metabólicos que puedan derivar en enfermedades graves. “Por ejemplo, tener colesterol alto y no controlado es no saber que uno está enfermo y que debe ser tratado. Al ser asintomático, puede aparecer un infarto agudo de miocardio o cerebral”, ejemplificó.

De acuerdo con los antecedentes familiares de cada paciente, Stagno recomendó un control periódico de la salud de cada persona. “Tener una alimentación saludable, practicar actividad física y controlar nuestra glucemia, colesterol y presión arterial, mejora la sobrevida porque evitamos las enfermedades cardiovasculares y neurológicas”.